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Este blog tiene el propósito de compartir mis ideas que estoy segura son las de muchos. Escribo sobre lo que me enternece, lo que me intriga, lo que me indigna o lo que me divierte. No me impongo fechas límite -escribo cuando quiero. El lector también puede elegir -hay relatos mas extensos, otros mas cortos. Entre cuando quiera. Vivo orgullosa de quien soy, de donde vengo y hacia donde voy, aunque no sepa como llegar... La imagen que lo acompaña es El Laberinto, de la serie Mandalas de Procesos, de Thalía Cuadrado, psicóloga clínica y artista, que me honra con su amistad. Me pareció apropiado para acompañar este blog sin dirección, porque son muchas las veces que me he sentido en un laberinto. Afortunadamente, siempre salgo…

viernes, 14 de febrero de 2020

Emparejados








EMPAREJADOS

Ayer pasé la tarde con mi Buddy y entre los muchos temas que abordamos, surgió el de la vida en pareja, probablemente porque hoy se celebra San Valentín.  El bombardeo de anuncios de parejitas tomadas de la mano, corazoncitos y chocolates es inmisericorde. Para quienes estamos sin pareja o para quienes estén en parejas disfuncionales, puede resultar en un triste recordatorio de que nuestra situación no responde a lo que se espera de nosotr@s.  Desde Adán y Eva el Arca de Noé para acá, la sociedad tiene una expectativa de que la vida espera que estemos en pareja y si no lo estamos, hay un defecto.  Sin lugar a dudas, es un defecto mayor cuando la pareja no es amorosa y peor aún, cuando es maltratante.

Son incontables los casos de mujeres que se mantienen en relaciones de maltrato porque no saben cómo enfrentar la vida solas, por el qué dirán o por mantener la imagen de la familia perfecta, aunque la realidad oculta diste mucho de ello.  En el caso de las mujeres sin pareja, comme moi, es interesante ver el contraste que se establece en contraposición a un hombre sin pareja.  El hombre sin pareja es un soltero empedernido, que sabe vivir la vida sin ataduras.  La mujer sin pareja lo está porque es muy maniática y “algo le debe pasar si está sola”.

En mi caso, llevo un tiempo sin pareja por decisión. Disfruto la compañía masculina, pero no estoy dispuesta a sacrificar mis creencias fundamentales a cambio de ir colgada del brazo de un hombre.  No ha sido fácil, lo admito. He tenido que soportar los comentarios de “es que tú eres demasiado exigente, difícil”, etc.; presenciar cómo en un restaurante los mozos se escabullen para no tener que atender la mesa de una mujer sola, o la preguntita de ¿y ya tienes a alguien?, seguida por el ah incómodo de mi interlocutor.

He disfrutado de experiencias maravillosas sola y admito que muchas veces añoro esa relación especial con un compañero de vida, pero me recuerdo que esas imágenes románticas no siempre son reales.  Hay gente que sobrelleva vidas llenas de hastío y de tristeza en pareja.  Yo no quiero eso para mí ni para nadie.  La gente debe estar junta porque se quieren, se respetan; porque ven la vida de modo similar, acorde con sus principios. Porque disfrutan su compañía, porque cuando ven algo hermoso sin su pareja, están deseosos de verle para contárselo.  Estar juntos debe ser una decisión diaria, independientemente de las circunstancias y las tensiones que trae la vida.  Estar juntos debe ser una decisión de acompañar a la pareja en sus penas y alegrías; compartir las carcajadas, las lágrimas y saber entender los silencios.

Durante este tiempo -que a veces siento demasiado largo sin pareja- me he permitido ver incontables paisajes, asistir a conciertos, cenas, almuerzos, en mi propia compañía.  Algunas de las fotos que tomo sorprenden a mis amistades al  mostrar algo que tal vez ell@s no han visto, porque la distracción de andar con otra persona a veces no nos permite admirar el paisaje en toda su dimensión.  Durante este tiempo he ampliado mi círculo de amistades y estar sola me ha permitido ofrecerles toda mi atención.  Mi vida es infinitamente rica por la presencia de aquéll@s que me brindan su amistad.

La felicidad no depende de vivirla en soledad -que no es lo mismo que sentirse sol@- o en pareja.  Consiste en aprovechar al máximo cada día con quienes nos rodeen o disfrutar de nuestra propia compañía.  Feliz Día de San Valentín, estén o no emparejados.

14 de febrero de 2020

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